 |
DATOS EXIF
|
CANON EOS1000D
|
CANON EF-S 18-
|
29-9-2012 13:37
|
ISO-400
|
F/ 5,6
|
1/80 sg
|
Inmejorables ocasiones o excusas para salir a realizar fotografías, de cualquier estilo, paisajes, retratos, urbanas, sociales, arquitectónicas, antiguas o modernas, nocturnas, atardeceres, amaneceres, etc., son sin duda, la organización de fotomaratones, generalmente por alguna entidad local como Ayuntamientos, pero también en ciertas ocasiones alguna asociación, fotográfica o de cualquier otro tipo, incluso prensa tradicional o digital.
Estos eventos fotográficos suelen estar dotados, con el fin de atraer al mayor número de participantes y así obtener un buen archivo fotográfico para usar posteriormente en promociones turísticas del municipio, con premios, de forma simbólica, en metálico o en especie, que son otorgados por un jurado que suele valorar, guiados principalmente por el gusto personal de sus componentes, antes que primar las cuestiones compositivas o técnicas de las fotografías.
El motivo, por mi parte, de acudir a estos fotomaratones, que se suelen realizar durante una jornada concreta y con la entrega de ese mismo día del número de fotografías estipulado en las bases, no es, ni mucho menos, la de ganar el premio en metálico que se suele otorgar, aunque desde luego a nadie la amarga un dulce, aparte de conseguir un pequeño pellizco de euros, sobre todo y fundamentalmente es el prestigio y el currículo que te da el ser ganador de un evento fotográfico.
Pero fundamentalmente, el principal motivo es el de acudir en compañía de amigos y colegas a ciudades y pueblos para fotografiar sus gentes, sus monumentos, sus encantos y todo lo que se ponga a tiro de cámara, y volver con un buen archivo fotográfico del que sin duda alguna buena foto saldrá.
Precisamente la fotografía que ilustra el post corresponde al fotomaraton, al que acudí en compañía de un buen amigo, que organizó la asociación fotográfica de Novelda, y que incluí en la categoría de “Novelda moderna”. Concretamente corresponde a un elemento dentro de la Casa de la Juventud, edificio de marcado carácter modernista. Traté de reflejar, junto con el modernismo del sillón, el minimalismo con los pocos elementos y colores, incluyendo el cartel en el encuadre para situar la fotografía y su historia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario