DATOS EXIF
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CANON EOS1000D
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TAMRON AF 18-
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23-02-2016 18:15
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35 mm
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ISO-200
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F/ 7,1
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25 sg
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La
clave para fotografiar agua en movimiento es una velocidad de obturación baja,
si es lo suficientemente baja se logrará el efecto deseado. Pero no vale solo
con este parámetro, habrá que ajustar los otros para que la fotografía no salga
quemada. Apertura de diafragma mínima para mayor profundidad de campo y para
contrarrestar el exceso de luz que entra por el objetivo al tener velocidades
lentas. Sensibilidad ISO baja para dar más tiempo de exposición junto con la
espera del momento idóneo que hay menos luz.
Cuando
hablamos de color, no sólo queremos capturar la realidad tal y como la ven
nuestros ojos, ya que el color es otro de los elementos del lenguaje visual que
al igual que la textura o el ritmo, ayudan a componer las imágenes para
conseguir transmitir lo que se desee. El color añade a las fotografías una gran
contraste, donde puede elementos muy dispares y contrapuestos, también por la
diferencia que pueda haber entre los tonos más claros y los más oscuros. Las
distintas tonalidades de que se dispongan mostrarán el contraste.
La fotografía del post se realizó en una salida a la localidad de La Vilajoyosa
(Alicante) donde se encuentra el pequeño farito al cual se accede por un paso
empedrado que se cubre cuando hay pleamar. En la fotografía se quería mostrar las líneas convergentes para dirigir la mirada del espectador dentro de la
fotografía y hacia el farito, junto los contrastes de color. También se uso la
técnica para reflejar el efectos seda del agua del mar y difuminarla. Se cerró
el diafragma y se prolongó la exposición para lograr el efecto habiendo poca
luz.
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